La serigrafía es un proceso de impresión muy longevo donde se aplica una tinta directamente sobre el sustrato a través de una plancha/malla. Esta malla se encuentra tensada en un marco. Esta plancha por tanto, tendrá una imagen sellada en el cuerpo que será la que haga reproducir nuestro diseño. Ésta hace que solo deje pasar la tinta por esa zona sellada y el resto no se imprima.
Al tener una plancha con un diseño creado para cada tinta hace que el sistema de impresión sea muy repetitivo. Se logrará hacer cientos y miles de impresiones sin perder calidad. Esto lo hace un tipo de impresión sencillo y sobre todo barato.
Los usos más comunes para la serigrafía es en productos de merchandising y sobre todo en productos textiles. Se destaca el uso de camisetas con este tipo de impresión.
Confección de malla/plancha:
Lo primero de todo es preparar el marco con la malla para poder luego plasmar el diseño en el producto.
Una vez esté bien colocada la malla/plancha en el marco para poder grabarla se debe limpiar con agua para eliminar posibles impurezas.
Cuando tengamos el diseño ya seleccionado debemos imprimir un negativo. Con la ayuda de una impresora fotosensible, ajustamos el negativo en la zona que queramos de la plancha y se inserta dentro de la impresora. Con ayuda de la misma se cierra bien y se procede al ajuste en vacío para que no entre nada de aire. Así pues se pone en marcha la impresora que con la proyección de la luz sobre el marco, teniendo éste el negativo bien colocado que dejará plasmado el diseño sobre la plancha.
Se vuelve a lavar bien con agua a presión para poder liberar la marca que haya dejado la impresora fotosensible. Ya tendremos listo marco con el negativo plasmado.
Hay que tener en cuenta que para cada tinta que se quiere plasmar en la impresión se debe usar una plancha distinta, es decir una plancha por tinta.
En este tipo de impresión al realizarse la aplicación por tinta única. En el caso de tener un diseño con varios colores, se realizan tantas planchas como colores tengamos en el diseño.
Aplicación sobre soporte textil
Para poder realizar la impresión sobre material textil, lo más común son las camisetas necesitaremos una máquina de serigrafía de varios cuerpos. Cada cuerpo contiene un mecanismo para poder acoplar nuestro marco en la parte superior y poder flexarlo hacia abajo para poder usar la técnica. En la parte inferior, a la altura de la cadera se encuentran las tablas donde podremos poner nuestro soporte textil y realizar la impresión en él.
Existen máquinas de un solo cuerpo, de dos cuerpos de 4 e incluso de 6 cuerpos para hacer la técnica de impresión en varios colores más veloz y eficaz.
Primer paso:
Lo primero de todo es ajustar el marco al soporte superior de unos de los cuerpos para que quede perfectamente alineado y no se mueva ni un ápice en la impresión. Una vez ajustado se flexa hacia abajo para, usando unas marcas en la tabla inferior, poder alinear bien el marco para una impresión cuadrada.
Hay que tener en cuenta que tanto el marco en la parte superior como la tabla inferior se deben ajustar perfectamente y mantener rígidas para no obtener problemas en el proceso posterior.
Segundo paso:
El siguiente paso es poner en este caso la camiseta bien ajustado en la tabla inferior para su posterior marcaje. Una vez listo se flexa el marco hasta una posición horizontal sin llegar a dejarlo caer hasta la zona de la tabla.
Es justo ese momento donde se aplica la tinta encima del marco/malla para marcarla sobre la camiseta. Se echa una cantidad de tinta respetable para el tamaño del logo ya que luego se podrá retirar sin problemas y volver a usarse. Cuando ya tenemos preparada la tinta y colocado el rastrillo de caucho encima se debe flexar hasta abajo haciendo tocar nuestra plancha sobre la camiseta.
Es justo ese momento en el que con el marco ya fijado en la tabla se pasará el rastrillo de caucho con firmeza y apretando hacia dentro para dejar pasar la tinta en nuestra zona marca por la plancha.
Cuando la tinta haya pasado al otro extremo de la plancha se libera el marco hacia arriba y ya estará plasmada la serigrafía en esa tinta sobre la camiseta.
MÁS DE UNA TINTA EN LA IMPRESIÓN
Para los casos donde el diseño a realizar tiene más de una color se harán tantas planchas como colores haya en el diseño.
Pongamos el ejemplo de que el diseño a imprimir tiene 3 colores distintos, negro rojo y amarillo. Se realizará una plancha con solamente la parte del diseño donde estará el negro, otra donde estará el rojo y otra donde estará el amarillo.
En estos casos, es muy importante alinear debidamente el soporte superior donde se coloca el marco con la tabla donde se coloca el soporte a imprimir. De esta forma, cuando se ponga cada una de las tintas éstas cuadren.
De manera que una vez creados todos los marcos, supongamos que tenemos una máquina de 4 cuerpos, pondremos cada marco en cada uno de los soportes que tenemos (sobrará uno). Así pues se alinean correctamente usando marcas que podremos poner y se realiza el mismo método de impresión comentado anteriormente uno por uno.
Se escoge el primer color y se plasma encima de la camiseta con mucho cuidado de no apretar demasiado para que no haya problemas con la tinta. Así sucesivamente con cada uno de los colores de manera individual.
ACABADO FINAL
Hay que tener en cuenta que el método de serigrafía está diseñado para poder hacer miles y miles de repeticiones exactas a un precio muy económico.
Es por eso que cuando el trabajo esté terminado en todas las copias realizadas se debe limpiar todo de manera efectiva y correcta para un uso posterior.
Primero, se debe retirar la tinta sobrante de cada uno de los marcos usados. Ésta tinta se vierte de nuevo en nuestro contenedor de tinta ya que se puede volver a usar, no causa daños. Se debe limpiar bien con un producto de limpieza todo el marco para dejarlo entero libre de trazas de tinta.
Así con cada uno de las planchas usadas. Se retirará del soporte y ya estará lista la máquina para un nuevo trabajo de serigrafía.
Los marcos o planchas usados para el diseño se pueden guardar el tiempo necesario para poder repetir un trabajo cuántas veces se quiera. Es una de las grandes ventajas de esta técnica de impresión.
En caso contrario, este marco o plancha se podrá reusar eliminando el negativo que hayamos plasmado anteriormente con agua a presión y así poder elaborar de nuevo un negativo distinto para plasmas otra impresión.
USOS DE LA SERIGRAFÍA
Anteriormente hemos expuesto cómo realizar un trabajo de serigrafía para un soporte textil, en éste caso camisetas que es donde sea usa más comúnmente este tipo de trabajos.
Sin embargo existe una gran variedad de soportes en los que ésta técnica es válida. Además se consigue un resultado perfecto de impresión.
Además del estampado en todo tipo de tejidos es usado en la impresión de plásticos como paneles o placas. En maderas y corcho, etiquetas. También en uso de cristales incluso espejos decorativos.
Otro de los usos más comunes de la serigrafía es la cartelería. Se usa de manera regular para carteles de gran formato o vallas publicitarias donde dar una gran visibilidad a la impresión. Esto es así ya que la resistencia de las tintas lo hace una impresión muy válida para este tipo de soporte.
HISTORIA
Se dice que la serigrafía nació unos 3000 años antes de Cristo por lo que es una de las técnicas de impresión más antiguas del mundo. El lugar donde apareció este tipo de impresión fue en las islas Fityi donde se expandió más tarde en China. Estamos hablando por lo tanto de una técnica de impresión milenaria que se desarrolló en la antigua China.
La serigrafía en papel no llegó hasta el siglo XX en Estados unidos. Fueron los pioneros en realizar esta técnica en sustrato de papel.
Más tarde a lo largo de estos años se ha realizado la serigrafía para usos artísticos. Está técnica la empezó a trabajarlo a principios de los años 30 Guy Maccoy.
Por lo tanto el auge del que hablamos se realizó en Estados unidos. Tomó una gran importancia al ser una técnica muy sencilla y barata y a la vez tan versátil para poder realizar muchas impresiones a un bajo coste.
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